EL ARCA DE NOÉ

Replica de cómo debió ser el Arca, según las instrucciones de Dios

La Biblia relata el Gran Diluvio Universal como el deseo de dios de devolver a la Tierra a su estado de inocencia. La inundación fue enviada a la Tierra para enmendar las fechorías de la humanidad y luego rehacer el mundo utilizando a Noé y repoblar la tierra con los animales que portaba en el interior del Arca. Pocos saben que este relato del Diluvio es muy anterior a la Biblia y está presente en muchas culturas diferentes alrededor del mundo: Historias de inundación Mesopotámicas, Deucalion en la mitología griega, la narración de la inundación del Génesis, los textos hindúes de la India, Bergelmir en la mitología nórdica y en la sabiduría De los pueblos k’iche y maya de Mesoamérica, la tribu de los Ojibwa de Lac Courte Oreilles Ojibwa en América del Norte, la Confederación Muisca y Cañari, en América del Sur, e incluso en escritos antiguos del Japón se relatan las historias de grandes inundaciones y Arcas para contener animales y personas, que debían ser salvados. Pero existe otra versión de por qué aconteció el Diluvio: Los archivos apócrifos nos cuentan que los Elohim, (significa Dioses), dejaron a 200 ángeles (sus hijos), conocidos como los Grigori, que en griego quiere decir “Observadores” o “Vigilantes”, descender a la Tierra para vivir y enseñar a los humanos. Pero a parte de enseñar a los humanos cosas que no debían, aprovecharon y tuvieron relaciones sexuales con las mujeres de la Tierra. Sus hijos fueron conocidos como los Nephilim, semidioses y una aberración a ojos de los dioses, por extender la violencia en el mundo. Los 200 ángeles caídos, los “Vigilantes” de los humanos, fueron duramente castigados por procrear con las hembras humanas, y enseñar a los humanos a hacer la guerra, además de enseñarles también a crear artefactos para dichos fines. Perdieron sus alas y fueron condenados a vagar por la Tierra, además de ser testigos de cómo los dioses dejaban caer el Diluvio y ahogar a todos los Nephilim, una raza abominable a sus ojos. El desequilibrio que existía en el mundo se olvidaría bajo las aguas y todo comenzaría de nuevo, sin los Nephilim entre nosotros. Pero estos ángeles caídos, no hay que confundirlos con los sublevados por Lucifer, ya que esto aconteció en la creación del mundo mucho tiempo antes.

Mapa donde se aprecia la difícil posición geográfica del Monte Ararat

La gente ignora también que la más antigua historia del Gran Diluvio se originó en la antigua Sumeria. Según las inscripciones antiguas, fue en «Eridu», hoy en día Abu Shahrein, Iraq, donde los dioses crearon la primera ciudad del planeta. El antiguo dios sumerio Enki, erigió la ciudad en el 5.400 a.C.. Ziusudra sería Noé en esta primera versión. Según la Biblia, el Arca de Noé encalló en el monte Ararat, en la actual Turquía.

La primera mención no bíblica de la existencia del arca data de 1271 y aparece en los diarios del famoso viajero veneciano Marco Polo, quien en su viaje a China aseguró haberse detenido en el monte Ararat. Tras ascender a su cima, el italiano describe haber visto una gran nave de madera enterrada en los glaciares más altos de la montaña. Varios siglos después, en 1916, el explorador ruso Vladimir Rosskowizky, enviado a la zona por el zar Nicolás II, también habría encontrado sobre los 4 mil metros de altura del monte una embarcación de madera semienterrada en el hielo, regresando a la corte con pruebas concretas de la existencia del arca, como fotografías, restos de madera e incluso una película de 15 minutos, los que fueron destruidos por los bolcheviques durante la revolución rusa de 1917.

Fotografía que muestra "algo" en el monte

Durante el año 1959, un fotógrafo turco volaba en un avión por las montañas del Monte Ararat, y de pronto fotografió un objeto que tenía la apariencia de un barco. Después de ofrecer las fotografías a varios científicos del Instituto “The Geodetic Institute of Turkey”, estos, se quedaron perplejos. Un estadounidense llamado Dr. Brandenburger de la Universidad Estatal de Ohio, recibió las fotografías para estudiarlas, ya que el Dr. Brandenburger era reconocido por su talento en Fotogrametría, ya que era un experto para las fuerzas armas de los EE.UU. El fue la persona que descubrió varios misiles rusos en las fotografías tomadas a la isla de Cuba durante el gobierno de Kennedy, lo que inició los trece días de más tensión en la llamada Guerra Fría. El Dr. Brandenburger, se dedicó a estudiar las imágenes y dijo: “No cabe duda que se trata de un barco sobre la montaña”, esta frase fue la que despertó el misterio en varios científicos y fue cuando se iniciaron las investigaciones para saber que tipo de barco, reposaba sobre la montaña Ararat.

Monte Ararat

El Monte Ararat es el pico más alto de Turquía, con 5.165 metros, siendo un volcán inactivo con su cima cubierta de nieves perpetuas. Es el principal símbolo de identificación de Armenia y su nombre turco se traduce como “Montaña del Dolor”. El Ararat pertenece territorialmente a Turquía, sin embargo, es parte de la Armenia Histórica y es el símbolo nacional de Armenia. Irán también tiene cercanía al monte. Está en una situación geográfica complicada y por eso existen serias dificultades para realizar expediciones a la zona.

Fotografía que muestra la anomalía

En 1950, el alpinista francés Fernand Navarra encontró restos de madera que analizó mediante carbono 14, que dieron el resultado de tener una antigüedad anterior a los 7.000 años. Temiendo la instalación de algún artefacto soviético en los límites fronterizos de la OTAN, la CIA envió al lugar varios aviones espía, que fotografiaron todo el área. Las fotos fueron secretas hasta 1995. Cuando vieron la luz, se comprobó que la citada anomalía se situaba justamente en el lugar donde la tradición dice que varó el Arca. Algunas fuentes aseguran que la CIA desenterró los restos bíblicos. Uno de los pilotos de los aviones espías se llamaba James Irwin. Con el tiempo ingresó en la Nasa, pisando la Luna en 1971, como miembro de la misión Apolo 15. A su regreso, alucinado y después de un periodo pasado en un sanatorio psiquiátrico, consagró su vida a la búsqueda del precioso objeto. La anomalía se encuentra a 4.663 metros de altura, está en la zona noreste del Monte Ararat y está cubierta por hielo. El tamaño de la formación, de acuerdo a las imágenes del satélite, 309 metros, equivaldría a los 300 codos que como explica el libro del Génesis medía el Arca de Noé. La anomalía es mayor que el Titanic y el Bismarck y es similar a los portaviones actuales.

Portada de un periódico de 1960

En 1968, una expedición arqueológica estadounidense, con carácter oficial, se desplazó a Turquía para examinar de cerca el hallazgo. Sus conclusiones fueron que aquél objeto no se trataba de ningún barco, ya que, según ellos, no habían encontrado ningún resto de madera por ninguna parte. En 1977, el arqueólogo bíblico aficionado Ron Wyatt, examinó la zona del Ararat y dijo que las huellas del terreno, se correspondían con las descripciones que el libro del Génesis detalla acerca de la nave que construyó Noé. Wyatt también recogió muestras del terreno que mandó analizar en los Estados Unidos. Los informes científicos refutaron que concordaban con las huellas que habría dejado el Arca de Noé. Pero la Arqueología oficial desacreditó las conclusiones de Ron Wyatt.

En 1979, mientras el presidente de EE.UU Jimmy Carter viajaba a bordo del avión Air Force One durante una gira internacional, que en ese momento sobrevolaba a baja altura el monte Ararat, un fotógrafo de la agencia UPI que viajaba en el avión, aseguró que él, otros colegas y el mismo mandatario vieron desde sus ventanas, durante el deshielo de un glaciar, una “especie de enorme construcción rectangular de madera, parecido a un gigantesco vagón de Metro, partido en dos y metido entre el hielo del monte”. El presidente Carter, por cierto, habría narrado este acontecimiento con lujo de detalles en el diario de la Casa Blanca.

La tablilla babilónica

Lo curioso de toda esta historia es que el 26 de diciembre de 2010 se liberó en el sitio Web de Julian Assange, Wikileaks, un documento que mostraba un telegrama de 1968, en el que se revelaba que los Gobiernos de Estados Unidos y Turquía habían ocultado el descubrimiento del Arca de Noé en Ararat. Además, Turquía colaboró con Estados Unidos para la recuperación de todos los materiales del Arca, los cuales fueron llevados a territorio norteamericano, en donde fueron escondidos. Uno de los últimos hallazgos que da otra vuelta de tuerca a este asunto, ha sido el descubrimiento de una tablilla de arcilla de origen babilónica, del tamaño de un móvil, escrita un milenio antes que la Biblia y en el que se relata la leyenda de Atrahasis, un héroe de Babilonia que construyó un arca circular gigante para salvarse de una gran inundación, llevando consigo animales salvajes recogidos de dos en dos. La reliquia se exhibe en el Museo Británico y según uno de sus conservadores este tipo de historias de la antigua Mesopotamia inspiraron el mito del arca de Noé.

Ha habido muchas expediciones, de ateos, religiosos, militares, con mayor o menor fortuna, incluso muertos, porque el clima extremo siempre aparece, para aquellos que se acercan demasiado a la verdad. Ahí están las fotografías y el resto de pruebas y teorías. Que cada uno haga su propia reflexión.

Si el Arca es un mito…. ¿Qué hay en verdad enterrado en el hielo del monte Ararat? ¿Hay más de un Arca en la Historia de la Humanidad?

El Arca como debió ser tras esta nueva teoría

Para más información interesante, pinchen aquí y aquí.

Y recomendar el  libro de 1995 "El increible descubrimiento del Arca de Noé"
Escrito por Charles E. Sellier y David W. Balsinger

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 POR: PEPÍN Y AURIFEX