PREMONICIONES
Hoy les presentaremos una serie de premoniciones o sueños
premonitorios que llegaron a cumplirse de forma similar o incluso igual a como
se predijeron.
Pero antes de entrar en materia, creo que es conveniente
saber qué es lo que opina la ciencia sobre este tipo de sueños, o lo más
cercano a una explicación científica.
- Explicación científica:
Hay que tener en cuenta que los sueños, al contrario del
lenguaje que usamos en nuestro día a día, usan un lenguaje simbólico y muy
fotográfico en algunos casos o bien resaltándonos siempre algún momento
concreto que es posible que recordemos hasta una vez despiertos.
Se sabe, gracias a Carl Gustav Jung, que fue un médico
psiquiatra, psicólogo y ensayista suizo, figura clave en la etapa inicial del
psicoanálisis; posteriormente, fundador de la escuela de psicología analítica,
que en los sueños existen dos grandes categorías de símbolos.
Por una parte, tenemos los pertenecientes al inconsciente
personal, elaborado por el propio individuo a través de la vida, de experiencias
personales y vivencias. Por otra, tenemos los pertenecientes al inconsciente
colectivo de la humanidad, que son modelos básicos de la mente, arquetipos
heredados que se repiten, transmiten y perpetúan en toda la especie humana a
través de las manifestaciones culturales, especialmente en los ritos, mitos y
creencias más antiguas, así como en las vivencias religiosas, espirituales o
psicológicas de la actualidad.
Teniendo constancia de esto, podemos llegar a la conclusión
de que sabiendo leer estos símbolos (de los cuales la gran mayoría son
universalmente conocidos, por lo menos dentro de los expertos en la materia) se
podría tener, por decirlo de alguna manera, artes o dones adivinatorios, pero
que en realidad no sería más que saber interpretar o leer dichos símbolos.
Estas prácticas e interpretaciones se han llevado a cabo
desde la antigüedad e incluso a día de hoy se siguen usando y perfeccionando.
Uno de los estudios sobre los sueños anómalos (término
científico para referirse a sueños premonitorios) que contó con profesores,
científicos y psicólogos de gran calibre en los trabajos que desempeñaban;
tales como el profesor Benjamin Kiling (Universidad de Michigan), la profesora
Linda Lyne (cátedra de Psiquiatría en la Universidad de Boston), el doctor Franklin
Smith (de la Boston Psychoanalytic Society) entre otros llegaron a encontrar
una serie de pautas que se repetirían en este tipo de sueños.
Por citar algún ejemplo de los resultados:
– Caída por el hueco de un ascensor con otra persona: inicio
o fin de una relación sentimental poco clara. Hubo coincidencia en un 92%.
– Caída desde lo alto de un edificio: discusiones y cambios
en el trabajo (98%).
– Pérdida de manos o pies: realización de un viaje
postergado desde hace tiempo (90%).
Sin embargo otros estudios, como por ejemplo un equipo de
científicos de la Universidad de Edimburgo, en Escocia, concluyó que las
personas que tienen sueños premonitorios tienden a buscar y analizar
inconscientemente señales ocultas a su alrededor.
También se asegura que todos estos sueños anómalos podrían deberse
a trastornos del sueño y al uso de somníferos, e incluso factores de sueño, por
ejemplo, el sonido de la tele —que es capaz de interferir en el sueño de una
persona.
Por lo que se considera que todos estos factores externos
(tales como noticias, creencias, miedos o temores etc y por otro lado ruidos
concretos de nuestro ambiente) podrían condicionar a una persona o influir en
sus sueños.
A continuación pasamos a contarles diferentes sueños
premonitorios o experiencias premonitorias que han tenido lugar a todo lo largo
de nuestra historia.
- En primer lugar, ya en la propia Biblia podemos encontrar
uno de los primeros sueños premonitorios.
José, hijo de Jacob, soñó que “que el sol, la luna y once
estrellas se postraban” ante él. El sueño anunció la elevación del mismo José,
quien luego de ser vendido como esclavo por sus once hermanos y enviado a
prisión en Egipto, se transformó en el hombre más poderoso de esa nación luego
que descifrara los sueños del Faraón.
- La reina Olimpia, madre de Alejandro el Grande, soñó que
su marido había puesto en su vientre un sello con la efigie de un león. El
sueño pronosticó el valor y las conquistas de su célebre hijo.
- El mismo Alejandro
Magno, durante el asedio a la ciudad fenicia de Tiro, en el año 332 a.C., soñó
con un sátiro danzando sobre un escudo.
Gracias a su interpretador de sueños, Aristandro, que acabó
llegando a la conclusión de que este sueño era un curioso juego de palabras:
Satyros (Sátiro en Griego), podía ser tomado como sa Tyros, cuyo significado
sería “Tiro es tuyo/a” y como todos sabemos Alejandro Magno, acabaría
conquistando la ciudad Tiro.
- Napoléon Bonaparte, previamente a la batalla de Waterloo,
en dos ocasiones soñaría con un gato negro, que suele achacarse a la mala
suerte y el infortunio. La batalla, como bien es sabido, terminó para él en una
estrepitosa derrota.
- Abraham Lincoln, soñó que entraba al cuarto oriental de la
Casa Blanca y veía un cadáver amortajado y custodiado por varios soldados. Al preguntarle
a un soldado quién era el fallecido, éste le respondió que el presidente había
sido asesinado. Lincoln murió días más tarde asesinado de un disparo, mientras
veía una obra de teatro.
- El escritor Mark Twain vio en sueños a su hermano Henry
dentro de un ataúd metálico y en cuyo pecho había un ramo de flores blancas y
una roja. Días después, el barco de vapor en el que navegaba Henry por el río
Mississippi se incendió y como resultado Henry acabaría muriendo. Lo más
curioso de todo, es que el ataúd era muy similar, si no igual y el ramo de
rosas que estaba colocado sobre el cadáver del hermano de Mark estaba dispuesto
tal como él había soñado.
- David Janssen, el actor protagonista de la famosa serie de
televisión “El fugitivo”, se vio a sí mismo en uno de sus sueños muerto dentro
de un ataúd, después de sufrir un ataque al corazón. Su vaticinio se cumplió
dos días después.
David Janssen |
- El famoso libro “The wreck of the titan” (El hundimiento
del titán a su traducción), escrito en 1898, narra una historia muy similar al
suceso que ocurrió con el hundimiento del Titanic, con la diferencia de que el
libro se publicó 14 años antes.
Escrito por Morgan Robertson, el cual dedicó gran parte de
su vida al mar, siendo marino mercante y que poseía bastante experiencia en la
navegación marítima.
Morgan fue un escritor, que si bien no tuvo mucho éxito en
el mundo de la literatura, se haría famoso debido a este libro.
Lo más escalofriante de todo, son sin duda todos los
detalles o coincidencias que hay en el libro y en el suceso real.
Pero las coincidencias que más llamaron la atención, fueron
las siguientes: Ambos buques chocarían con un iceberg, situado casi a
cuatrocientas millas de Terranova, sucedió en el mes de abril, fue durante el
viaje inaugural, y el apellido de ambos capitanes era “Smith”.
- La muerte del jugador de fútbol Jesús Castro.
Antes de que se produjese tal suceso hubo una serie de
sueños anómalos y sucesos extraños alrededor del jugador de fútbol.
El primer sueño ocurrió en la playa de Amió, situada en
Cantabria, donde tiempo después fallecería Jesús.
Según cuenta su mujer, todos decidieron meterse a la playa,
menos Jesús que preferiría descansar un rato en la orilla, en donde soñaría con
algo escalofriante.
Un tiempo después, Jesús, se despertaría sobre saltado, muy
nervioso y dispuesto a abandonar la playa.
Jesús Castro, jugador del sporting de Gijón |
En un primer momento, no quiso contarle el mal sueño a su
mujer pero al final decidió hacerlo y esto sería lo que le contó: "Me dijo que soñó estar en el agua y que
unas manos triaban de él hacia abajo y no le dejaban salir del agua"
Tan solo una semana después, la familia volvió a la misma
playa.
Jesús Castro, con la
ayuda de dos turistas, salvaría a un niño de ser ahogado.
Un tiempo después, el 26 de julio de 1993, la familia Cobián
volvería a la costa Cantábrica, en realidad fue un desvío que decidieron hacer
sobre la marcha cuando acudieron cerca de allí por un asunto familiar.
Otro momento escalofriante aquél mismo día fue cuando el
propio hijo de Jesús, el cual no quería ir allí, le dijo a su madre: “Tengo una
premonición, tengo miedo".
Cuando ya se encontraban allí, después de haber estado
jugando un rato con sus hijos, Jesús se adentró mar adentro, poco después uno
de ellos avisó a su madre de lo que estaba ocurriendo "al cabo de un rato
vi a mi hijo corriendo hacia el agua. Cuando fui yo, vi a mi marido ahogándose.
Se lo tragó el agua tal y como él había dicho que había soñado”
La mujer dijo que pese a que su marido no era ningún nadador
olímpico, sabía nadar bien y que, contrario a la especulaciones, ese no habría
sido el motivo de que se terminase ahogando. No obstante, el mar también andaba
revuelto ese día.
Por: Fran "Dela"
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