10 Crímenes sin resolver, que ocurrieron en Halloween
En estas señaladas fechas en las que se acerca la fiesta de SAMHAIN, o como el común de los mortales la conoce: Halloween; les acercaré algunos de los crímenes sin resolver, que tuvieron lugar durante estos extraños y fríos días. Días en los que según se cree, el velo entre los vivos y los muertos se levanta para que unos entren en el mundo de los otros.
Los asesinatos de Ronald Sisman y Elizabeth Platzma
Durante las
primeras horas del Halloween de 1981, una pareja que vivía en Manhattan, cuyos
nombres eran Ronald Sisman y Elizabeth Platzman, fueron asesinados en su
apartamento, que estaba cerca del pueblo de Greenwich. La pareja fue golpeada
antes ser disparada en la cabeza, y el apartamento fue saqueado. Se rumoreaba
que Sisman estaba involucrado en temas de drogas, por lo que las autoridades
creyeron en un principio que se trataba del motivo del asesinato. Sin embargo,
el caso dio un giro extraño cuando un informador penitenciario, afirmó que uno
de sus compañeros había predicho los crímenes, antes de que ocurrieran. Ese
recluso resultó ser el famoso asesino llamado “El hijo de Sam”, David
Berkowitz.
En 1977, Berkowitz fue condenado por disparar y matar
a 6 personas y herir a otras 7. Siempre se especuló con que Berkowitz estaba
involucrado en un culto satánico y que no realizó todos los asesinatos de “Hijo
de Sam”. De acuerdo con el informante, Berkowitz había dicho que su culto
estaba planeando entrar en una pequeña casa cerca de Greenwich el día de
Halloween. Ellos realizarían dicho asesinato ritualístico, disparando a la
pareja en la cabeza antes de saquear el lugar para borrar cualquier prueba
incriminatoria. Cuando se le preguntó acerca de este hecho, Berkowitz respondió
que Sisman poseía una grabación de uno de los tiroteos del “Hijos de Sam”, que
pretendía entregar a las autoridades para evitar algunos cargos que tenía
por drogas. Si bien no se encontró ninguna evidencia que apoyara las
afirmaciones de Berkowitz, él proporcionó una descripción exacta del
apartamento de Sisman. Nadie sabe realmente si los asesinatos de Sisman y Platzman
tuvieron algo que ver con el caso “El hijo de Sam”, pero están todavía sin
resolver.
La desaparición de Hyun Jong “Cindy” Song
Hyun Joong “Cindy” Song era una estudiante surcoreana
de 21 años que iba a la Universidad del Estado de Pennsylvania. En 2001, ella
se puso un disfraz de conejito para ir a una fiesta de Halloween en un pub del
Colegio Estatal. Antes de dejar dicho club, ella estuvo unas horas pasando el
rato con sus amigos antes de llegar a su apartamento a las 04.00 a.m. Esta fue la
última vez que la vieron. Después de que Cindy se considerara perdida, se
realizó una búsqueda en su apartamento. No había signos de ninguna pelea, pero
varias pertenencias, incluidas las pestañas postizas usadas para su disfraz,
estaban ahí, indicando que ella entró en casa después de ser vista por última
vez.
Poco después, un testigo informó que le pareció haber
visto una mujer que parecía Cindy en Chinatown, en el distrito de Philadelphia.
Dicha mujer iba dentro de un vehículo con un hombre no identificado y
suplicando ayuda. Una nueva pista se produjo después de que en 2003, un hombre
llamado Marcus Selenski fue arrestado cuando encontraron 5 personas enterradas
en su patio.
A pesar de que ninguno de estos restos pertenecía a Cindy, un informante
le contó a la policía que Selenski y un cómplice llamado Michael Jackson
Kerkowski Jr la habían secuestrado. Después de que Cindy fuera violada y
asesinada, los dos hombres enterraron su cuerpo supuestamente en otro lugar.
Los restos de Kerkowski fueron encontrados en el patio de Selenski, el
informante afirmó que Kerkowski fue asesinado por quedarse con las orejas del
disfraz de conejito de Cindy como recuerdo. Hasta el momento, no se han
encontrado pruebas para incriminar a Selenski por la desaparición de Cindy,
pero en Enero de 2014, los restos quemados de 12 personas más, fueron
encontrados en su propiedad. Está por ver si alguno de los restos pertenece a Cindy
Song.
El asesinato de Chaim Weiss
Chaim Weiss era un judío ortodoxo de 15 años de edad
que asistía a la Mesivta de Long Beach, una escuela de secundaria yeshiva en
Nueva York. La mañana después de Halloween en 1986, el colegio entero fue
sorprendido cuando Chaim fue descubierto muerto en su dormitorio. Había sido
asesinado a golpes después de sufrir un fuerte golpe en el cráneo y apuñalado
varias veces en la cabeza, pero el arma del crimen no pudo ser encontrada en
ningún lugar. Como no había evidencias de estrangulamiento, se cree que Chaim
fue asesinado mientras dormía, antes de que su cuerpo fuera movido al suelo. Chaim
era un chico bastante popular, por lo que nadie podía imaginar el motivo dicho
crimen.
Había pistas que señalaban, que el asesino estaba
familiarizado con las costumbres religiosas del judaísmo ortodoxo. A pesar de
que había sido una noche fría, la ventana del dormitorio de Chaim estaba
abierta, una costumbre que a menudo se hace, para que el espíritu de la persona
fallecida salga. Tras el asesinato, uno de los rabinos del colegio dejó una
vela conmemorativa en la habitación de Chaim. Dos días después, otra vela
apareció en su habitación, pero nadie admitió haberla colocado. No había signos
de que la entrada hubiera sido forzada, por lo que el asesino podría haber sido
alguien conocido por la víctima. Durante la noche, otro estudiante admitió
haber sido despertado cuando la puerta de su habitación se abrió de repente,
antes de volverse a cerrar bruscamente. ¿Podría el asesino haber entrado en
otra habitación por error? Han pasado 28 años y las autoridades no han podido
encontrar la razón, por la que Chaim fue asesinado de una manera tan brutal. El
caso sigue sin resolverse.
La identidad de “calcetines naranjas”
En el
Halloween de 1979, el cuerpo de una joven fue encontrado en una alcantarilla
cerca de la Interestatal 35, a
las afueras de Georgetown, Texas. La víctima parecía tener unos 20 años y fue
agredida sexualmente y estrangulada. Parecía haber sido asesinada ese mismo día
y la única pista de su identidad era un anillo ovalado de plata que tenía en su
mano. La víctima estaba desnuda y la única prenda que llevaba eran un par de
calcetines de color naranja. Como nunca fue identificada, su apodo fue
“calcetines naranjas”.
Años después, el asesino en serie Henry Lee Lucas
confesó el asesinato de “calcetines naranjas”. Incluso afirmó haber tenido sexo
con su cadáver. Aún así, Lucas no dio la identidad de la mujer. Sólo afirmó
haberla recogido mientras hacía autostop y que su nombre era Joanie o Judy.
Después de ser condenado a muerte en 1984, Lucas se retractó de su confesión
con el fin de librarse de su condena. De hecho, una investigación demostró que
Lucas estaba trabajando en Florida el día del asesinato. Lucas solía confesar
asesinatos que él no realizaba, por lo que no sabe el número exacto de personas
que asesinó. Lucas murió en prisión en 2001, pero el crimen de “calcetines
naranjas” no ha sido resuelto.
La coneja Jane del condado Walter
En la mañana del 1 de Noviembre de 1980, un camionero
descubrió el cuerpo desnudo de una adolescente al lado de la interestatal 45, a las afueras de
Huntsville en el condado de Walker, Texas. La víctima fue agredida sexualmente
antes de ser estrangulada. Como nunca se identificó, fue conocida como “la
coneja Jane del condado Walker”. Se estimó que fue asesinada unas horas antes
de ser encontrada y una historia bastante interesante surgió después de que
varios testigos informaran de haberla visto en la noche de Halloween.
Después de salir del vehículo de un hombre no
identificado cerca de la estación de South End Gulf, Jane preguntó a numerosas
personas sobre la dirección para llegar a la prisión de Ellis Unit, ya que
planeaba visitar a un amigo. Aún así, cuando su fotografía circuló entre los presos,
nadie admitió haberla visto o conocerla. Más tarde esa noche, una camarera de
una parada de camiones, tuvo una conversación similar con Jane. La chica dijo
que tenía 19 años, procedía de la zona de Aransas Pass, y parecía dar a
entender que sus padres no se preocupaban mucho por ella. Después de que la
chica fuera asesinada exactamente un año después de “calcetines rojos” y de que
hubiera muchas similitudes entre los dos asesinatos, Henry Lee Lucas fue
declarado posible sospechoso. Sin embargo, nunca hubo claras evidencias para
relacionar a Lucas con el asesinato, y la coneja Jane del condado Walker nunca
fue identificada.
El asesinato de Marvin Brandland
En 1982, Marvin Brandland, de 62 años de edad, vivía
con su esposa, Ethel, en Fort Dodge, Lowa. El Halloween de ese año, los
Brandland tenían que decidir si escogían truco o trato para las personas que
venían a su casa. En una de esas ocasiones, abrieron la puerta y se vieron
sorprendidos por un hombre que llevaba una máscara. Él dijo: “truco o trato”.
“dadme todo el dinero o disparo”. Los Brandland pensaron que les estaba
gastando una broma e intentaron quitarle la máscara, pero el hombro no les
dejó. En ese momento, el hombre enmascarado entró en la casa y sacó un arma.
Exigió a la pareja que lo llevaran al sótano y que le dieran todo el dinero que
tuvieran en la caja fuerte. Los Brandland sospecharon, ya que muy poca gente
sabía de la existencia de su caja fuerte en el sótano. Por esa razón, Marvin
estaba convencido de que algún familiar o amigo les estaba gastando una broma.
Cuando el hombre enmascarado los llevaba al sótano a través de la cocina,
Marvin intentó arrebatarle el arma. El intruso terminó disparándole a Marvin en
la garganta mientras salía corriendo de la casa y se le caía la máscara. Ethel
quedó traumatizada por la muerte de su esposo y murió sólo unos meses después.
Con los años, un conocido de la familia Brandland, alardeaba supuestamente de
haber cometido dicho crimen, por lo que se realizaron diversas pruebas de ADN
en la máscara. Aún así, no había material suficiente para realizar dichas
pruebas, por lo que no hubo evidencias suficientes para retener al sospechoso y
el caso Brandland quedó sin resolver.
La muerte del recién nacido de Key West
En la mañana del 31 de Octubre de 2004, el ama de
llaves del Hilton Resort and Marina en Key West, Florida, encontró en el baño
de mujeres situado en el vestíbulo algo horrible. Ella pensó en un principio
que se trataba de una broma de Halloween, pero la situación se volvió
terrorífica cuando se dio cuenta de que se trataba del cuerpo de un bebé recién
nacido. El cuerpo todavía tenía el cordón umbilical y estaba envuelto en la
placenta, indicando que alguien que acababa de tenerlo decidió tirarlo a la
basura. Las autoridades no pararon para averiguar quién había sido el responsable.
Horas antes, una mujer embarazada acompañada de 3
hombres fueron vistos en el vestíbulo del hotel. Ella entró al baño de mujeres
mientras los hombres esperaban fuera. En un principio, una mujer testigo entró
al baño y escuchó a una mujer gimiendo dentro de uno de los lavabos. Cuando la
sospechosa preguntó a los hombres si conocían a la mujer, uno de ellos afirmó
ser su novio, incluso la llamó por su nombre, que sonaba como “Samantha” o
“Sonia”.
La mujer embarazada estuvo en el baño aproximadamente
40 minutos y un guardia de seguridad la vio agarrándose el estómago cuando
salía. Cuando el guardia le preguntó que si estaba bien, ella le dijo que
estaba mareada por ir de fiesta. Los cuatro individuos salieron del hotel, pero
el bebé no fue descubierto hasta la mañana siguiente. Huellas dactilares,
pruebas de ADN y muestras de sangre fueron tomadas del baño y comparadas con
las de varios sospechosos. Sin embargo, la mujer y los tres hombres no han sido
identificados, y ninguno ha sido procesado por la muerte del bebé.
La misteriosa muerte de Chris Jenkins
Chris Jenkins era un estudiante de 21 años de la
Universidad de Minnesota que visitó un bar de Minneapolis en la noche de
Halloween de 2002. Después de dejar el bar a medianoche, Chris desapareció sin
dejar rastro. Permaneció perdido 4 meses hasta que su cuerpo fue descubierto en
el río Mississipi. Como todavía llevaba su disfraz de Halloween, todo apuntaba
a que murió poco después de desaparecer. Chris estaba bebido esa noche, y como
la causa de la muerte se determinó como ahogo, se creyó en un principio que fue
un accidente o suicidio. Sus padres rechazaron esta suposición y presionaron
para que se realizara una investigación a fondo. Finalmente, en 2006, la muerte
fue declarada como homicidio.
Si bien las autoridades no dieron detalles muy
específicos, alegaron que un sospechoso encarcelado afirmó que estaba presente
cuando Chris fue asesinado y arrojado al río desde un puente. Aunque ese
testimonio fuera real, no había pruebas suficientes para incriminarlo. Aún así,
una teoría fue que Chris Jenkins fue víctima de uno de los asesinatos de “cara
sonriente”. Durante este periodo de tiempo, aproximadamente 40 estudiantes de
los Estados Unidos fueron víctimas de ahogos. En algunos de estos casos, un
grafiti de “cara sonriente” fue encontrado cerca de los cuerpos. Esta teoría
conectaba dichos casos y afirmaba que las víctimas eran drogadas antes de tirar
los cuerpos al río para que así parecieran accidentes. Aunque no se encontrara
el grafiti de “cara sonriente” cerca del cuerpo de Chris Jenkins, las
autoridades no puedes pasar de largo las similitudes que tiene con otros casos
sin resolver.
La desaparición de Steven Damman
En Halloween de 1955, Marilyn Damman cogió a su hijo
de de dos años, Steven, y a su hija de 7 meses, Pamela, para ir a un
supermercado en East Meadow, Nueva York. Mientras ella compraba, dejó a Steven
esperando fuera de la tienda junto a su hermana, que estaba dentro del carrito.
10 minutos después, Marilyn salió de la tienda y quedó paralizada al ver que
Steven ya no estaba. Aunque Pamela estaba dentro del carrito, a Steven no le vio
por ninguna parte.
En muchos casos de secuestros de niños, lo normal es
que el secuestrador quiera un hijo propio y lo sustraiga de otra familia para
cambiarle el nombre. Con los años, las pruebas de ADN se utilizaron para ver si
se le dio una nueva identidad a Steven. En un principio, los investigadores
notaron que Steven tenía un gran parecido al famoso caso del “niño de la caja”,
un niño que fue encontrado muerto en una caja de cartón en Philadelphia en
1957. Aún así, las pruebas de ADN confirmaron que Steven y el “niño de la caja”
no eran la misma persona. En 2009, un hombre de Michigan llamado John Barnes
salió a la luz por ser un posible Steven, pero el ADN demostró que no era
así. Es posible que el Steven adulto esté viviendo otra vida en otra parte y
con otra identidad, inconsciente de que fue arrebatado a su verdadera familia.
De todas maneras, su paradero sigue siendo desconocido.
El asesinato de Nima Louise Carter
La noche de Halloween de 1977, los padres de una bebé
de 19 meses llamada Nima Louise Carter, la dejaron en su cuna en su casa de
Lawton, Oklahoma. A la mañana siguiente, los padres de Nima entraron en shock
cuando vieron que ya no estaba ahí. Como las ventanas de la habitación de Nima
estaban cerradas, la teoría era que el secuestrador había estado escondido en
el armario y se llevó a la niña mientras sus padres dormían en el salón. Un mes
después, un grupo de niños estaban jugando en una casa abandonada a cuatro
manzanas de la casa de Nima. Cuando abrieron el frigorífico de la casa, se
quedaron aterrorizados cuando vieron el cuerpo descompuesto de un bebé. El bebé
fue identificado como Nima Louise Carter, que murió de asfixia.
Un crimen similar ocurrió en Lawton en Abril de 1976 cuando un par de
gemelas de 3 años, Mary y Tina
Carpitcher, fueron secuestradas por una mujer joven y confinadas en un
frigorífico en otra casa abandonada. Cuando las gemelas fueron encontradas dos
días después, Mary estaba asfixiada, pero Tina consiguió sobrevivir. Tina
identificó a su secuestradora como una niñera adolescente llamada Jacqueline
Roubideaux. Aún así, por la edad de la niña, su testimonio no fue tomado en
cuenta, ya que no había suficientes evidencias que lo corroboraran. Jacqueline
Roubideaux era a veces la niñera de Tina y de Louise Carter. Ella se convirtió
en clara sospechosa después del asesinato de Nima, pero una vez más, no había
ninguna evidencia clara. Años después, Jacqueline fue arrestada por el
asesinato de Nima y fue condenada a cadena perpetua. Ella murió en la cárcel
por un cáncer de hígado en 2005, pero nunca llegó a admitir el asesinato no
resuelto de Nima Louise Carter.
He aquí solo algunos de los casos sin resolver, por desgracia existen muchos más y este año..., puede que vuelvan a ocurrir.... TENED CUIDADO AHÍ AFUERA.
💀🎃
Por: AURIFEX
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